El presidente de Perú, Pedro Castillo, interpuso una demanda de habeas corpus contra el juez, el fiscal y el coronel de la Policía que autorizaron el allanamiento y registro la residencia del Palacio de gobierno para buscar a su cuñada el pasado miércoles, informó este martes el Poder Judicial.
El habeas corpus presentado por Castillo este lunes detalla que su pretensión principal es que «se declare la nulidad parcial» de la resolución fechada el pasado 5 de agosto que autorizó el allanamiento, registro de inmueble y «el descerraje del predio de la zona residencial» de Palacio de gobierno.
A través de su defensa, Castillo presentó la demanda contra el juez del Octavo Juzgado de Investigación Preparatoria, Raúl Romero, el fiscal integrante del Equipo Especial de Fiscales contra la Corrupción del Poder, Hans Aguirre, y el coronel de la División de Investigación de Delitos de Alta Complejidad (Diviac) Harvey Colchado.
Añade que también «se ordene a los demandados y, en general al Ministerio Público, Poder Judicial y Jefe de División de Investigación de delitos de Alta Complejidad, que se abstengan de volver a cometer el acto lesivo denunciado».
La demanda de Castillo destaca que estos hechos invocan «a la vulneración de su derecho a la inviolabilidad de domicilio».
El pasado 9 de agosto el Poder Judicial de Perú ordenó la detención preliminar por 10 días de la cuñada del mandatario Yenifer Paredes, a quien la pareja presidencial crio como una hija y que está siendo investigada por presunto tráfico de influencias por supuestamente ofrecer una obra de saneamiento en Cajamarca, la región oriunda de Castillo.
Personal policial y del equipo especial de fiscales contra la corrupción del poder acudieron a Palacio de gobierno, en el centro histórico de Lima, en una diligencia, aparentemente, para detener a Paredes, quien no fue encontrada en ese operativo, pero un día más tarde se entregó a la Fiscalía.
Castillo, señaló este miércoles que la detención de su cuñada es «parte de la lucha» y aseguró que, aunque algunos sectores han «golpeado seriamente» a su familia, no van a quebrarlo y su Administración seguirá trabajando por un país «con igualdades».