La ciudad china de Chengdú amplía el confinamiento por Covid-19 en la mayoría de los distritos

La ciudad china de Chengdú prolongó el jueves el confinamiento de la mayoría de sus más de 21 millones de habitantes, con la esperanza de frenar la transmisión de infecciones por Covid-19.

La ciudad, capital de la provincia suroccidental de Sichuan, que ha luchado recientemente contra las olas de calor, los cortes de electricidad y un terremoto, fue confinada el 1 de septiembre después que se detectaran casos de Covid-19, convirtiéndose en la mayor metrópolis china afectada por las restricciones desde Shanghái a principios de año.

Desde entonces, Chengdú ha notificado en su mayoría menos de 200 nuevos contagios al día, cifras pequeñas comparadas con los brotes de otras partes del mundo. El 7 de septiembre se detectaron 116 nuevos casos, frente a los 121 del día anterior, informaron las autoridades el jueves.

Se esperaba que el confinamiento se levantara el miércoles, pero las autoridades dijeron a última hora del día que el virus seguía suponiendo un riesgo en algunas zonas.

De los 21,2 millones de habitantes de la ciudad, 16 millones están bajo confinamiento.

Los residentes de las zonas cerradas serán sometidos a pruebas diarias y los que den positivo serán puestos en cuarentena. Los residentes de las zonas consideradas de alto riesgo no podrán salir de sus casas.

Chengdú aspira a que no se produzcan nuevos contagios en la comunidad en el plazo de una semana, informó en un comunicado su mando de prevención y control del Covid-19.

Un puñado de distritos salieron del confinamiento total, pero sus residentes todavía tienen que someterse a pruebas masivas el viernes y el domingo.

Los residentes de los distritos que ya no están bajo confinamiento total tienen prohibido ir a otros distritos y se les desaconseja salir de Chengdú por razones no esenciales.

Las políticas se ajustarán «dinámicamente en función de la evolución de la epidemia», dijo la oficina de prevención del Covid-19.

Congreso del partido

China está teniendo dificultades para contener la variante ómicron, altamente transmisible, imponiendo diversos grados de confinamiento para detener su propagación. Shanghái fue confinada en abril y mayo. Otras grandes ciudades que han sufrido cuarentenas y restricciones son Xi’an y Shenzhen.

El banco japonés de inversión Nomura dijo que hasta el martes, 49 ciudades chinas tenían varios niveles de confinamientos o medidas de control, con una cifra estimada de 291,7 millones de personas afectadas, por encima de los 161,3 millones de la semana anterior.

Esas personas representan el 20,7% de la población china y proceden de zonas que aportan el 24,5% de su producto interior bruto, dijo Nomura.

Las acciones chinas bajaban el jueves, en dirección contraria al repunte de otros mercados asiáticos, ya que el Covid-19 nublaba las perspectivas económicas.

En el conjunto del país, China detectó el miércoles 1.439 nuevos contagios, según la Comisión Nacional de Salud. No hubo nuevas víctimas mortales, al igual que el día anterior, lo que mantiene el número total de muertes en 5.226.