El inmunólogo estadounidense Anthony Fauci, principal asesor del presidente Joe Biden sobre el coronavirus y rostro de la lucha contra la pandemia en Estados Unidos, anunció que dejará su cargo en diciembre.
Además, en ese mes abandonará su puesto como director del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas (Niaid), el cual ocupó por 38 años.
«No me estoy jubilando», aclaró el médico de 81 años en un comunicado, asegurando que comenzará «un nuevo capítulo» en su carrera.
«Gracias a las muchas contribuciones del doctor Fauci a la salud pública se han salvado vidas aquí en Estados Unidos y en todo el mundo», declaró Biden, quien aseguró que el país norteamericano «es más fuerte, más resistente y más saludable gracias a él».
Fauci ha dirigido la respuesta de Estados Unidos a los brotes de enfermedades infecciosas desde la década de 1980, desde el VIH/sida hasta el COVID-19, y ha trabajado bajo siete presidentes, comenzando con Ronald Reagan. «Ha sido el honor de mi vida liderar el Niaid», expresó.
Cuando el COVID-19 se propagó globalmente por primera vez desde China en 2020, el doctor se volvió una fuente confiable sobre el virus. Pero sus opiniones honestas sobre los primeros fracasos de Estados Unidos para hacer frente a la pandemia lo llevaron a un conflicto con el expresidente Donald Trump.